Siempre que pensaba en pollo al ajillo me venía a la mente el pollo troceado, con láminas de ajo dándole sabor. Una vez retirado el ajo, se salaba, se rebozaba en harina y se freía en aceite bien caliente.
Vamos, que así lo hacía yo.
Viendo una receta en la web, me animé a probarla porque era completamente distinta a la que solía hacer.
El resultado ha sido fantástico. Lo han devorado en casa.
En la receta usan un pollo entero, pero yo cociné la mitad. Hice unas pequeñas modificaciones. A ver si os gusta.
Bueno, vamos con la receta. Necesitaremos:
1/2 pollo troceado como para freír
8 dientes de ajo ( en la receta original pone una cabeza de ajos entera. A mí me pareció mucho. Para la próxima vez usaré más dientes de los que utilicé)
1 hoja de laurel
Aceite de oliva (que cubra el fondo de una olla baja)
Sal
Pimienta negra recién molida
125 ml. de vino blanco
Una pastilla de caldo de pollo (yo utilizo el 100% natural de Gallina Blanca)
Un poquito de agua, en la que disolvemos la pastilla)
1 ramita de perejil picada
En primer lugar, pelamos los dientes de ajo y los quebramos con un golpe seco ayudándonos con la parte plana del cuchillo y apoyando la mano para hacerlo. Hay que hacerlo con cuidado para no cortarse. Esto hará que el ajo se abra un poco y que suelte su sabor.
Vertemos el aceite (que solo cubra el fondo de la olla) y ponemos a calentar. Echamos el pollo con los dientes de ajo y la hoja de laurel. Salamos un poquito (daros cuenta que utilizaremos después la pastilla de caldo) y molemos un poco de pimienta negra por encima. Dejamos que se dore bien. Yo lo hago a fuego fuerte pero no demasiado. Para haceros una idea, en mi vitro el 12 es el más fuerte, pero yo lo doro al 10 o 9 ). Se dora igual pero no se queman los ajos.
Ahora incorporamos el vino blanco y dejamos que se evapore el alcohol. A continuación, echamos la pastilla de caldo disuelta en el agua y removemos.
Bajamos el fuego y tapamos. Dejamos cocinar el pollo a fuego lento unos 20 minutos. Es importante dejar tapada la olla para que el pollo se haga en su propio jugo, para que se concentren los sabores. El resultado será que la carne esté tierna y con mucho sabor. Si queremos de vez en cuando meneamos la olla.
Lo servimos caliente y espolvoreado con un poco de perejil picado.
Qué fácil, no? Animaros. Os chuparéis los dedos.
NOTA:
Se puede comer solo con un buen trozo de pan ( porque la salsita está de muerte). Pero también admite combinaciones con ensalada, patatas fritas, cocidas o arroz en blanco. Yo lo hice con éste último.
Cualquiera de ellas es una combinación deliciosa!!!!
Hola Beatriz. El pollo hecho de esta manera, además de tener mucho sabor está delicioso.
ResponderEliminarBuen fin de semana.
Un abrazo.
Gracias Juan!
EliminarYo siempre lo hacía frito pero así me ha gustado mucho.
Lo repetiré sin duda.
Igualmente. Un saludo!
Beatriz ¡que buena receta! Y eso que es sencilla a más no poder, yo suelo hacer el Pollo así cuando viene mi cuñado a casa, porque le encanta. En Sevilla lo llamamos Pollo al Ajo, y aunque ya no se encuentra en casi ningún bar o restaurante, antes era muy habitual. En Triana hay un sitio llamado Sol y Sombra, que lo bordan, y el solomillo lee Cerdo lo hacen igual y está para morirse de rico, eso sí prefiero hacerlo en casa por qué sale más barato, jajaja.
ResponderEliminarBesos
Hola Concha!
EliminarA los que nos gusta la cocina nunca paramos de aprender.
Yo nunca lo había comido así y me ha gustado mucho.
Me gustaría ir a Sevilla a comerlo en el "Sol y sombra" aunque me queda un poco lejos...ja ja ja...
Pero nunca se sabe. Si vuelvo a Sevilla no me lo pierdo.
Tú seguramente lo bordas,como todas tus recetas.
Gracias por pasarte!
Bicos!!!!
A mi me gusta de las dos maneras, jijiji, pero es cierto que en guiso tiene muchísimo sabor y da menos trabajo, sin tener que estar pendiente de la sartén, de si se queman los ajos...¡Muy buen plato!
ResponderEliminarGracias Alicia!
EliminarA mi también me gusta de las dos formas pero como siempre ando investigando para probar nuevas recetas me encontré 2 e hice mi propia versión.
El pollo adquiere un sabor super rico y nos ha encantado! Además no se mancha nada la cocina, je je je...
Va a formar parte de mi recetario habitual.
Bicos!
Me encanta el pollo así, y con esa salsa, qué rico!
ResponderEliminarHola Olga!
EliminarNunca había hecho el pollo al ajillo así, guisado. Lo solía hacer frito.
Ha sido todo un descubrimiento y un éxito.
Ya forma parte de mi recetario habitual.
Bicos!