lunes, 16 de enero de 2017

MI "DURUM" KEBAB DE POLLO

Hola! 
Hoy presento mi propia versión de un durum kebab. Algún experto en la materia se echará las manos a la cabeza, pero después de tomarlos en varios restaurantes turcos he hecho mi propia interpretación.
El durum kebab no se hace con pan de pita sino que se hace con pan tipo tortilla y presentado en forma de "wrap" o rollo.
Como podréis comprender no tengo el asador vertical en casa de donde sacar las láminas de distintas carnes que utilizan (cordero, pollo o ternera) jajajaja...pero me apaño con cortar el pollo en tiras finas.
Es ideal para cenar ya que se hace rápido y no es pesado.
Yo en vez de salsa de yogur normal la hago con la de "Ligeresa" por eso de cuidar un poco la línea después de los excesos navideños. Aunque estará más rico seguro con la clásica.
Bueno, vamos con la receta. Necesitaremos:

1 pechuga de pollo
Unas hojas de lechuga
1 tomate
Un trocito de queso feta
Salsa de yogur (yo "Ligeresa" de Calvé)
Tortillas de trigo enrollables 

Para el adobo del pollo:
1 diente de ajo
4 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharadita de pimentón dulce
Pimienta negra recién molida
Sal


Lo primero que vamos hacer es el adobo. 
Para ello mezclamos en un mortero un diente de ajo machacado, el aceite, el pimentón dulce, la pimienta negra y la sal. 
Después añadimos este adobo a la pechuga de pollo que habremos cortado previamente en tiras finas y las impregnamos bien. Las dejamos reposar media hora.
Lavamos las hojas de lechuga, las escurrimos, secamos y las cortamos en tiras. Lavamos el tomate y lo cortamos en lonchas finas. Hacemos lo mismo con el queso feta, en lonchas finas y después en trocitos.




Una vez que haya transcurrido el tiempo, freímos el pollo en el mismo aceite del adobo y una vez que esté hecho lo reservamos manteniéndolo caliente.
Tostamos las tortillas de trigo en una plancha. 
Ahora montamos el kebab.
Ponemos la tortilla sobre una superficie limpia. Ponemos lechuga, tomate, pollo, queso feta y salsa de yogur. La enrollamos con cuidado cuidando de cerrarla bien por abajo, haciendo una doblez, para que no se nos salga el relleno al comerlo. Un truco es poner un trozo de papel de aluminio al final, a su alrededor bien apretado.
Si os gustan los kebabs animaros a hacerlos en casa! Os gustarán!


jueves, 12 de enero de 2017

LANGOSTINOS AL HORNO

Sigo publicando recetas que hice estas navidades, ésta precisamente el día de Año Nuevo.
Son unos langostinos al horno. 
He visto varias formas de hacerlos por la red, pero la que os presento hoy es una receta de mi amiga Noelia. Cuando un día fuimos a comer a su casa, los langostinos nos encantaron y, por supuesto, le pedí la receta.
La verdad es que están buenísimos, se hacen muy rápido y no manchan nada la cocina.
Son ideales para un primer plato sin complicarnos la vida.
Bueno, vamos con la receta. Necesitaremos:

800 gr. de langostinos frescos o descongelados
200 ml. de aceite
25 ml. de vino blanco
Un chorrito de vinagre
2 limones (solamente el zumo)
2 dientes de ajo
Sal


Se lavan los langostinos. Los secamos con papel de cocina un poco.
Se prepara la fuente del horno. En la base echamos un poco de sal, encima colocamos los langostinos y volverlos a salarlos por encima.

Preparamos la salsa en el vaso de la batidora. Echamos el aceite, el vino blanco, el vinagre, el zumo de limón y los dientes de ajo. Batimos y nos quedará como una mayonesa líquida.
La vertemos por encima de los langostinos.

Introducimos la bandeja en el horno, precalentado previamente, a 200ºC durante 15 minutos aproximadamente, dependiendo del tamaño. Los míos eran medianos.

NOTA:
Esta vez creo que eché demasiado zumo de limón. Eran bastante grandes. Para la próxima echaré el zumo de uno solo. Aunque esto va por gustos. A mi marido le pareció que estaban estupendos!

Habéis visto? Más fácil imposible.

lunes, 9 de enero de 2017

TRONCO DE SAN SILVESTRE

Mi primera publicación de este año que comenzamos es enseñaros el postre que hice para la cena de Fin de Año. Es un Tronco de San Silvestre, o lo que se conoce también como Tronco de Navidad.
Aunque lo he subido un poco tarde, este tronco sirve para cualquier celebración durante  el resto del año.
Había hecho varios años este postre, pero nunca me llegaba a convencer del todo el resultado. O se me pegaba al paño húmedo la plancha del bizcocho, o se me rompía al enrollarlo, o me quedaba seco...
Esta vez por fin me salió!!!!
Una pega solamente: Lo podía haber decorado, pero no me dio tiempo. Pensaba ponerle unos champiñones de merengue, escribir Feliz Año 2017 con chocolate blanco o darle un poco de color utilizando fondant para hacer unas hojas de acebo... Incluso se me olvidó espolvorearlo con azúcar glas simulando la nieve. A la próxima lo presentaré más bonito. De todo se aprende.
Bueno, vamos con la receta. Necesitaremos:

Para la plancha del bizcocho: (original de http://lacocinadefrabisa.lavozdegalicia.es/# )

4 huevos (separados en 4 yemas y 4 claras)
115 gr. de azúcar (90 gr. + 25 gr.)
1 cucharadita de vainilla en pasta
50 gr. de harina
50 gr. de Maizena
1 pizca de sal
Azúcar glas

Para el almíbar:

100 gr. de azúcar glas
1 vaso de agua
1/4 de vaso de Brandy

Para el relleno:

500 ml. de nata para montar
150 gr. de azúcar

Para la cobertura:

200 gr. de chocolate negro para postres
200 ml. de nata
50 gr. de mantequilla


Comenzamos haciendo la plancha del bizcocho
Precalentamos el horno a 175ºC con calor arriba y abajo.
Batimos las claras a punto de nieve con una pizca de sal y con los 25 gr. de azúcar. Reservamos.
Por otro lado, batimos las yemas con el azúcar hasta que blanqueen.
Añadimos los dos tipos de harina tamizadas e integramos bien con las yemas. Reservamos.
Volcamos la mitad de las claras ayudándonos de una lengua de silicona o espátula, con movimientos envolventes para evitar que se bajen. Una vez que estén bien integradas, hacemos lo mismo con el resto de las claras.
La masa resultante la volcamos sobre una bandeja de horno forrada con papel sulfurizado. Para evitar que el papel se mueva antes de echarla, se ponen unos pequeños pegotes de mantequilla debajo del papel.
Hay que procurar que la masa quede bien extendida y por la totalidad de la bandeja. Para ello utilizamos una espátula.
Horneamos durante 10 o 12 minutos, más o menos, hasta que la superficie este un poco doradita.
Espolvoreamos con azúcar glas, y esa cara la ponemos sobre un paño ligeramente humedecido. Quitamos el papel del horno y volvemos a espolvorear azúcar glas. Lo enrollamos y lo dejamos enfriar completamente antes de rellenarlo. Con el azúcar glas evitaremos que se nos pegue al paño.

Ahora hacemos el almíbar con el que mojaremos la plancha del bizcocho.
Cogemos un cazo y ponemos el agua y el azúcar. Cuando hierva añadimos el brandy y que reduzca un poco. Dejamos enfriar.

Montamos la nata para el relleno. Para ello habremos introducido previamente el bol y las varillas en la nevera para que estén fríos. También la nata ha de estar bien fría.
Ponemos la nata en un bol y batimos con las varillas eléctricas. Cuando vaya cogiendo cuerpo vamos añadiendo el azúcar hasta que termine de montarse. Reservamos en la nevera.

Para hacer la cobertura calentamos la nata en un cazo y cuando esté a punto de hervir, retiramos del fuego y añadimos el chocolate negro troceado para que se vaya fundiendo. Removemos para que no se queden grumos. Cuando el chocolate se haya derretido por completo en la nata, vamos echando poco a poco trozos de mantequilla hasta que esté todo integrado. Reservamos a temperatura ambiente.

Ahora viene EL MONTAJE:
Desenrollamos con cuidado la plancha del bizcocho y la colocamos sobre un papel de horno.
Cortamos un poquito los bordes para que esté mas estético y rectangular.
Mojamos, con ayuda de un pincel de silicona, la plancha con el almíbar. Yo eché mucho menos del que hice pensando en no pasarme, pero la próxima vez echaré más.
Con la nata en una manga pastelera, vamos haciendo tiras de nata para cubrir el bizcocho. Así nos aseguraremos que nos quedará más uniforme la capa. Hay que dejar unos centímetros sin relleno al final de la plancha para cerrar mejor el tronco. Lo enrollamos presionando un poco con los dedos y con cuidado.
Cubrimos todo el tronco con la cobertura de chocolate y rayamos con un tenedor para imitar las vetas del tronco de un árbol.
Con ayuda de una espátula y con una mano pasamos el tronco a la bandeja de presentación. Metemos en la nevera un par de horas y ... ¡ Listo para disfrutarlo!!!!!