Hoy voy a compartir la receta de un dulce que poco a poco se va introduciendo en las costumbres culinarias navideñas de nuestro pais: El Panettone, un pan dulce típico italiano relleno de pasas y frutas confitadas.
Cada año se ven más panettones a la venta en los supermercados, y esta realidad ha hecho que me pique el gusanillo de hacerlo yo en casa, porque no me vais a negar que el industrial al lado del casero no tiene nada que hacer. He consultado varias recetas y algunas de ellas me echaban para atrás. Hablaban de que se necesitaban varios días para hacerlo. Eso fue hasta que encontré la receta del panettone de www.kanelaylimon.blogspot.com.es , que siempre es garantía de éxito. No es una receta que sea muy laboriosa, y menos si se hace con la panificadora, pero la masa necesita varios levados, y eso lleva su tiempo. Yo en el mismo día tenía mis panettones hechos. He variado la receta en el relleno porque a nosotros no nos gustan demasiado las pasas y las frutas confitadas. El resultado ha sido muy bueno y lo repetiré sin dudarlo. Aunque sigo prefiriendo nuestro Roscón de Reyes, jejejejejeje...
Con esta receta quedan inauguradas las navidades en Cocinando con filus!!!!
Bueno, que me lio, vamos con la receta. Necesitaremos:
Para el fermento:
100 gr. de harina de fuerza
30 gr. de levadura fresca
20 gr. de azúcar
70 gr. de agua tibia
Para la masa:
5 huevos ligeramente batidos (a temperatura ambiente)
150 gr de mantequilla cortada en dados (a temperatura ambiente)
170 gr. de azúcar
1/2 cucharadita de café de emulsión de limón
1/2 cucharadita de café de vainilla en pasta
La piel rallada de una naranja
El fermento
600 gr. de harina de fuerza
Una pizca de sal
Para el relleno:
Pepitas de chocolate al gusto del consumidor
Comenzamos haciendo el fermento. Para ello, lo primero que haremos será deshacer la levadura en el agua tibia. A continuación, mezclamos en un bol la harina, el azúcar y el agua con la levadura hasta que estén perfectamente integrados los componentes del fermento. Tapamos con papel film y dejamos levar hasta que doble su volumen.
Una vez que leve el fermento, preparamos la masa. Basta con añadir los ingredientes de la masa en la cubeta de la panificadora en el orden mencionado arriba:
Huevos ligeramente batidos, mantequilla, azúcar, emulsión de limón, vainilla en pasta, ralladura de naranja, el fermento, la harina y la sal (muy importante ya que potencia los sabores. A mi me quedó un poco soso. Para la próxima vez, echaré más sal). Seleccionamos el programa de amasar que dura 15 minutos. Al acabar, aún será una masa pegajosa. Lo ponemos dos veces más en ese mismo programa. Así conseguimos una masa manejable sin necesidad de estar añadiéndole más harina. Quitamos la masa de la panificadora, hacemos una bola y la ponemos en un bol grande( porque va aumentar el tamaño considerablemente) untado con una fina capa de aceite.
Lo tapamos con film transparente y lo dejamos levar en un sitio abrigado y sin corrientes de aire (yo lo meto en el horno apagado). Tardará unas horas.
Una vez que la masa haya levado, la volcamos en una mesa un poco enharinada y la estiramos con un rodillo con forma más o menos rectangular. Repartimos las pepitas de chocolate y enrollamos la masa como si fuera un brazo de gitano.
Cortamos dos o tres trozos (a mi me salieron un panettone grande y dos pequeños). Damos forma de bollo uniendo cada trozo por las puntas y dejando la unión hacia abajo. Metemos en los moldes de papel. No deben sobrepasar 1/3 del molde. Aplanamos la superficie con el puño.Volvemos a dejar levar en un sitio abrigado y sin corrientes de aire y cuando las masas lleguen al borde del molde estarán listos para hornear. Los sacaremos, pondremos a calentar el horno a 180 ºC y mientras los pincelamos con huevo batido. Cuando el horno esté caliente los metemos. Si vemos que se queman por arriba los tapamos con papel de aluminio. Los pequeños los dejamos sobre 25 minutos y el grande sobre 40 minutos. Hay que vigilarlos porque si nos pasamos con el horneado se secan. Para saber si están los pinchamos por el borde y si sale limpio los quitamos.
Para enfriarlos es bueno colgarlos boca abajo. Si, como suena. Así el copete no se baja. Para ello, los atravesamos por la base con una brocheta de madera para pinchos y los colgamos entre una mesa y una silla por ejemplo.
Descolgamos cuando estén completamente frios.
Solo queda disfrutarlos y compartirlos.
¡Feliz Navidad!
¿Cuántas veces os habéis encontrado en el cajón de las verduras de la nevera medio pimiento rojo, medio pimiento verde, una zanahoria... esperando a que les llegue el turno? Lo peor es que muchas veces no les llega y se nos pueden estropear.
Esta receta sirve para aprovecharlas y comer rico y sano. Es un arroz de verduras que está buenísimo. Lo he hecho hoy al mediodía para acompañar unos filetes y nos ha encantado. Además en la Fussioncook se hace en un santiamén.
Vamos con la receta. Necesitaremos:
2 vasitos de la FC de arroz (yo usé Brillante Sabroz)
6 vasitos de la FC de agua (este tipo de arroz lo necesita, absorve mucho)
1/2 pimiento rojo
1/2 pimiento verde
1 zanahoria
1 puerro (solo la parte blanca)
6 u 8 champiñones frescos
1 pastilla de caldo de verduras (yo uso 100% natural de Gallina Blanca)
1 sobrecito de azafrán molido
Aceite de oliva
En primer lugar seleccionamos Menú Manual 10 minutos. Echamos un chorrito de aceite de oliva. Cuando esté caliente echamos las verduras picaditas y los champiñones en láminas. Dejamos sofreir un poco. Echamos un poquito de sal. Cuando ya estén medio rehogadas las verduras echamos el arroz y damos unas vueltas para que se impregne del sabor del sofrito. Añadimos el agua, la pastilla de caldo desmenuzada y el azafrán. Removemos. Cancelamos menú y programamos Menú Arroz con válvula cerrada. Cuando termine, despresurizamos manualmente. Y... ¡ A comer!
Y sigo con las magdalenas...
El otro día me traje del limonero de mi madre unos limones. Tienen un olor... Nada que ver con los que compramos.
Entonces decicí hacer una receta que tenía pendiente: Magdalenas de yogur y limón.
Salen muy ricas y con un aroma que llena toda la casa mientras las horneas. No hay nada como la repostería casera. Vamos con la receta. Necesitaremos:
3 huevos
200 gr. de azúcar
1 yogur natural (125 gr.)
75 gr. de aceite de girasol (yo uso Koipesol Delice, que es especial para repostería)
La piel rallada de un limón
250 gr. de harina
10 gr. de levadura de repostería
Una pizca de sal (imprescindible, potencia los sabores)
En un bol ponemos los huevos con el azúcar y los batimos con las varillas hasta que blanqueen y espumen. Añadimos el yogur poco a poco, después el aceite en hilo y la piel rallada de limón. Batimos para que se integren bien.
Tamizamos la harina con la levadura y la incorporamos poco a poco a la mezcla anterior. Lo hacemos con unas varillas manuales o con una espátula. Añadimos una pizca de sal y mezclamos.
Tapamos el bol con la masa resultante y la metemos en la nevera por lo menos una hora.
Cogemos una bandeja especial para magdalenas y vamos colocando las cápsulas de papel en los huecos.
Cuando las vayamos a hornear, precalentamos el horno a 225ºC con calor arriba y abajo. Rellenamos las cápsulas de las magdalenas hasta 3/4 partes de su capacidad. Espolvoreamos con azúcar por la superficie.
Metemos las magdalenas en el horno y bajamos la temperatua a 200ºC. Horneamos durante 15-20 minutos. Comprobamos que están hechas con la ayuda de un palillo. Si al introducirlo sale seco, están hechas. Las retiramos del horno y al ratito las vamos colocando en una rejilla para que vayan enfriando.
Se conservan varios días si las preservamos del aire. Yo las guardo en un portatartas.
¡Me encanta la pasta! Como podéis ver me gusta con todo tipo de verduras, carnes, mariscos... Siempre ando buscando distintas formas de hacerla. La receta que publico hoy es de Karlos Arguiñano (aunque la he adaptado un poco). Al verla sabía que la iba a hacer. Y le ha llegado su hora. Se hace muy rápido y está muy buena, aunque al tener nata la salsa llena más que con otro tipo de acompañamiento. Vamos allá. Necesitaremos:
300 gr. de tallarines
300 gr. de champiñones frescos
24 gambas
100 gr.de bacon en lonchas
2 dientes de ajo
200 ml. de nata para cocinar
200 ml. de vino blanco (yo Albariño)
Aceite de oliva
Pimienta negra recién molida
Sal
Perejil fresco picado
En primer lugar, ponemos a cocer los tallarines en agua hirviendo con sal el tiempo que indique el fabricante de la pasta.
Mientras, vamos preparando la salsa. Ponemos un poquito de aceite de oliva en una tartera baja y echamos dos dientes de ajo en láminas para que se doren. Una vez que estén dorados, los retiramos y echamos el bacon en tiras y los champiñones limpios y laminados. Salpimentamos y salteamos unos 5 minutos más o menos. Incorporamos las gambas, el vino (dejamos que se evapore el alcohol) y la nata. Dejamos reducir la salsa.
Cuando la pasta esté al dente, la escurrimos.
Para emplatar, colocamos unos cuantos tallarines en un plato, echamos la salsa y espolvoreamos con perejil picado. Riquísimos!!!!!
La receta que publico hoy se conoce como jamón asado aunque realmente es paleta de cerdo fresca o lacón lo que utilizo porque la carne es más jugosa. Aquí en Galicia se come mucho.
Es la primera vez que lo he hecho y he quedado muy contenta con el resultado, con lo que formará parte de mi recetario habitual. Todo son ventajas: Se hace prácticamente solo, está muy bueno. cunde mucho y es económico. ¿Qué más podemos pedir? Vamos con la receta.
Necesitaremos:
1/2 paleta de cerdo fresca (+ o - de 2 kg. y medio)
3 dientes de ajo
1 hoja de laurel
1 cucharadita de perejil picado
1 cucharadita de tomillo
1 cucharadita de orégano
1 cucharadita de romero
2 o 3 cucharadas de aceite de oliva
1/2 vaso de coñac
2/3 de vaso de vino blanco Albariño
Sal
Pimienta negra recién molida
Al comprar el lacón, le pedimos al carnicero que nos haga en la piel unos cortes haciendo cuadrados.
Adobamos el lacón el día anterior con un majado en el mortero de ajo, perjil,, tomillo, orégano, romero y aceite. Esta pasta la extendemos por toda la pieza. Salamos bien y molemos una poca pimienta negra y se la echamos. El laurel va entero.
Colocamos el lacón en una fuente apta para el horno y dejamos tapado con papel de aluminio en la nevera.
Al día siguiente, precalentamos el horno a 180ºC con la bandeja de rejilla. Antes de meter el lacón en el horno, vertemos la mitad del coñac. Introducimos en el horno.
A la media hora se le da la vuelta y se le echa un chorro de vino blanco. Hay que vigilar que no quede seco.
Así cada media hora, le damos la vuelta y vamos mojando con vino, coñac y vino.
A mitad de cocción, pinchamos un poco.
La última media hora debe estar con la piel hacia arriba. Si vemos que no tuesta lo suficiente, ponemos el grill un ratito, vigilando que no se nos queme.
A las dos horas y media o un poquito más de cocción, más o menos, apagamos el horno. Mientras vamos friendo unas patatas.
Fileteamos y servimos con un poco de salsita y las patatas.
Nota: Se calcula 1 hora por cada kilo de carne (más o menos)
¡Qué fácil es de hacer y que rica estaba! Hoy os presento una receta que es muy sencilla y tiene un resultado muy bueno: La empanada de hojaldre de jamón y queso con salsa de tomate casera.
La semana pasada mi comadre y yo organizamos una comida en su casa. Yo tenía que hacer un entrante y un postre. Como parte de mi tiempo se lo llevaba el postre (que al final no me salió y me cogí un cabreo monumental) pensé en hacer esta empanada que la había visto en el blog de Kanela y Limón. Si tenéis oportunidad no dejéis de probarla. Necesitaremos:
2 planchas de hojaldre (las mías de Mercadona)
250 gr. de jamón cocido
250 gr. de queso en lonchas
Orégano
Salsa de tomate casera (hice más de la necesaria para aprovechar para otra receta):
1 kg. de tomates maduros
1 cebolla
1 cucharadita de azúcar
1 cucharadita de sal
Aceite de oliva
En primer lugar, haremos la salsa de tomate. Para ello picamos la cebolla fina. Pelamos los tomates y hacemos lo mismo, los cortamos en cuadraditos pequeños. En una olla no muy grande echamos un poco de aceite de oliva. Añadimos la cebolla picada y dejamos que poche un poco. Cuando esté transparente añadimos los tomates, una cucharadita de azúcar (para evitar la acidez del tomate) y una cucharadita de sal. Removemos. Dejamos que rompa a hervir y, cuando esto suceda, bajamos el fuego y dejamos cocinar a fuego lento durante 1 hora.
Una vez que termine trituramos la salsa con la batidora de cuchillas. Reservamos.
Para hacer la empanada, extendemos una plancha de hojaldre en la bandeja del horno. Aprovechamos el papel que trae. Pinchamos con un tenedor toda la superficie. Extendemos salsa de tomate. Encima colocamos el jamón cocido, después el queso y, por último espolvoreamos de orégano. Colocamos la otra plancha de hojaldre encima y cerramos los bordes. Volvemos a pinchar el hojaldre y le hacemos un agujero para que respire. Pincelamos con huevo batido y metemos en el horno precalentado a 200ºC hasta que esté dorada. Retirar y dejar entibiar un poco sobre una rejilla. Y... ¡ a disfrutarla!!!!
Para la fiesta de Samaín del cole de Carla nos pedían un postre con productos del otoño: castañas,nueces,calabaza... Y muchos estareis pensando ¿Qué es eso del Samain? Es la fiesta que se celebra la noche del 31 de octubre al 1 de noviembre. Lo que todo el mundo conoce como Halloween. Aunque la mayoría cree que es una fiesta americana, es de origen celta y que los irlandeses, al emigrar a América, llevaron consigo.
Pues bien, yo me decanté por unas magdalenas de calabaza y pepitas de chocolate. Es una receta que repetían muchos blogueros aunque la adapté un poco. La calabaza le da una jugosidad y un dulzor increible a las magdalenas. Estaban muy buenas, y no sólo me lo pareció a mi, en la fiesta no quedó ni una. Vamos con la receta.
Necesitaremos:
300 gr. de calabaza cocida y hecha puré
250 gr. de azúcar
3 huevos
70 gr. de aceite de aceite de girasol Koipesol Delice (especial para repostería)
250 gr. de harina de repostería
2 sobres dobles de gaseosas (dos blancos, dos azules) de Mercadona o un sobre de levadura Royal
Una pizca de sal
Pepitas de chocolate
En primer lugar cogemos, más o menos, 500 gr. de calabaza y los cortamos en tacos. Los ponemos a cocer. Una vez que esté cocida la calabaza, la dejamos escurrir bien. Batimos con una batidora de cuchillas. Para la receta utilizaremos 300 gr.
Añadimos el azúcar y seguimos batiendo hasta conseguir un puré fino.
Es el momento de ir echando los huevos, de uno en uno, y batimos (esta vez con batidora eléctrica de varillas) hata que estén perfectamente mezclados.
A continuación, incorporamos el aceite poco a poco,en hilillo, hasta que esté bien mezclado.
Tamizamos la harina con las gaseosas o con la levadura y vamos añadiéndola a la masa, mezclando con unas varillas manuales. Le echamos una pizca de sal.
Dejamos reposar la masa en la nevera por lo menos una hora. El frío de la masa y el calor del horno harán que las magdalenas suban mejor.
Precalentamos el horno a 210ºC con calor por arriba y por abajo.
Cogemos una bandeja para hacer magdalenas y le vamos colocando las cápsulas de papel (las mías tienen unas calabazas muy monas, por cierto). Vamos añadiendo masa hasta la mitad de su capacidad, añadimos pepitas de chocolate, cubrimos con un poco más de masa hasta llegar a las 3/4 partes de su capacidad y ponemos unas pocas pepitas más.
Metemos la bandeja en el horno y bajamos la temperatura a 190 ºC. Horneamos durante 15-20 minutos, más o menos. Pinchamos con un palillo y si sale seco es que están listas.
Sacamos la bandeja del horno y a los 5 minutos cogemos las magdalenas y dejamos enfriar sobre una rejilla.
¡Feliz Samain!!!!!
Siempre quise hacer galletas de pistola pero había oído que era difícil dar con la masa adecuada. No puede ser ni demasiado líquida ni demasiado densa. Tenía guardada una receta de kanelaylimon.blogspot.com.es y vi una oferta en Casa de una pistola para hacer galletas por 7.99 euros. Ni me lo pensé. Se que sus recetas dan buen resultado. Y la experiencia me ha dado la razón. Salen perfectas. Las he decorado un poco para hacerlas más variadas. Las que tengais la pistola guardada, quitarla de la alacena y... ¡a sacarle partido!
Necesitaremos:
300 gr. de harina de repostería
200 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
100 gr. de azúcar glass
1 huevo
1 cucharadita de esencia de vainilla
Para decorar las galletas:
Chocolate negro para fundir
Chocolate blanco para fundir
Almendras crocanti
En primer lugar batimos la mantequilla (que ha de estar blanda) . Añadimos poco a poco el azúcar glass y seguimos batiendo hasta que la mezcla palidezca. Una vez que esté bien mezclado añadimos el huevo y luego la harina tamizada. La masa resultante se mete en la pistola. Antes de cerrarla le ponemos la plantilla para hacer la galleta que más nos guste.
Apoyamos la pistola sobre la bandeja del horno sin papel, sin engrasarla, sin nada. Tal cual. Damos un "tiro" y después de un segundo levantamos la pistola con un golpe seco. Ya tendremos la primera galleta formada. Seguimos el mismo procedimiento con las demás, dejando un pequeño espacio entre una y otra. Podemos cambiar la plantilla para hacer galletas de distintas formas.
Cuando tengamos toda la la bandeja completa horneamos a 150 ºC durante 10- 12 minutos, vigilándolas, sabeis que cada horno es distinto. Yo las dejé 12 minutos.
Retiramos la bandeja del horno y ponemos las galletas a enfriar en una rejilla.
No las dejeis enfriar sobre la bandeja, podrían quedarse pegadas y se romperían al intentar quitarlas. Yo ese problema no lo tenía porque al tener sólo una bandeja, la quitaba, dejaba las galletas enfriar en la rejilla y enfriaba la bandeja bajo el grifo de agua fria, la secaba y hacía otra tanda de galletas.
Una vez que las galletas estén frias podemos decorarlas. Yo las decoré con chocolate negro y blanco fundido con la ayuda de un biberón de boca estrecha. También utilicé almendra crocanti picada.
Para conservarlas, guardarlas en la típica "lata". Yo me compré una muy mona, je,je,je...
Salen sobre unas 80 galletas, pero no os asusteis, entre que son de un bocado, que siempre habrá "voluntarios" para ayudar a comerlas y que se conservan bien varios días en la lata... ¡No os durarán nada!
¡He de decir que estos macarrones han sido todo un descubrimiento! La receta base pertenece a cocinandoconneus.blogspot.com.es aunque la he adaptado a mi gusto. Desde que la vi sabía que me iba a gustar y la verdad es que fue así. Y no sólo a mi me gustó. En casa fue un éxito.
Otra cosa que me gustó es que habían sobrado unos pocos y al día siguiente estaban muy jugosos. No parecían recalentados.Vamos con la receta.
Necesitaremos:
350 gr. de plumas
1 puerro (la parte blanca)
10 salchichas frescas
Salsa de tomate casera (600 ml. más o menos)
1 brick pequeño de nata para cocinar (200 ml.)
Aceite de oliva
Sal
Pimienta negra recién molida
Orégano
Queso parmesano rallado
En primer lugar haremos la salsa de tomate. Para ello, cortamos una cebolla mediana muy finita. Pelamos los tomates y los cortamos en cuadraditos pequeños. En una olla ponemos a pochar la cebolla con un chorrito de aceite de oliva. Cuando esté transparente, echamos los tomates troceados. Removemos, echamos una cucharadita de sal y otra de azúcar (para evitar la acidez del tomate) y dejamos que rompa a hervir. Después bajamos el fuego y dejamos cocinar 1 hora a fuego lento.
Mientras se hace la salsa de tomate, cocemos la pasta en abundante agua con sal el tiempo que indique el fabricante. Cuando esté cocida, colamos y reservamos.
Por otro lado cortamos el puerro también finito y pochamos en una olla con aceite. Cuando esté pochado, retiramos. En ese mismo aceite freimos las salchichas en dados para que cojan color. Cuando se doren añadimos el puerro que teníamos reservado y lo retiramos del fuego.
Pasamos la salsa de tomate por la batidora y la añadimos a las salchichas y al puerro. La ponemos a calentar, rectificamos de sal y añadimos el orégano y la pimienta negra. Echamos poco a poco la nata y removemos para que se vaya integrando bien. Dejamos sobre 3 o 4 minutos al fuego y retiramos.
Finalmente vertemos la pasta en una fuente apta para el horno, añadimos la salsa, mezclamos y espolvoreamos de queso rallado. Metemos la fuente en el horno y gratinamos unos minutos.
Deliciosos!!!!!
Nota: He de decir que la foto no le hace justicia a este plato. Lo que pasa es que no hay presupuesto para una cámara nueva, jejejeje...
¡Parece mentira que aún no tenga publicada en el blog ninguna receta de croquetas!
Hoy le ha llegado el turno a las croquetas de pollo y un "chisquiño" de jamón. Digo lo de "chisquiño" porque me había quedado un trocito pequeño de jamón de otra receta en la nevera y se lo he echado a la masa para aprovecharlo y darle un poquito más de sabor. La verdad es que salieron muy ricas. ¡Tanto a las peques como a los mayores nos han encantado!!
En esta receta hago cantidad suficiente para poder congelar algunas ya que te sacan de un apuro cuando no tienes mucho tiempo para cocinar sabiendo que están ricas, son caseras y sanas. Vamos con la receta. Necesitaremos:
1 cebolla pequeña
1/2 pollo pequeño cocido
Un "chisquiño" de jamón
Caldo de pollo
100 gr. de mantequilla
2 chorritos de aceite de oliva
175 gr. de harina
1 litro de leche (o casi)
Sal
Para rebozar:
2 huevos
Pan rallado
Aceite de oliva
En primer lugar, desmenuzamos la carne de pollo y quitamos todo tipo de pieles, grasas y huesos. La cortamos menudita, al igual que el trozo de jamón.
A continuación, picamos la cebolla muy finita. Para ello utilicé el accesorio picador de la batidora. Ponemos a fuego lento la mantequilla hasta que se derrita. Añadimos dos chorritos de aceite de oliva. Echamos la cebolla picada y dejamos rehogar hasta que esté transparente.
En ese momento añadimos la carne de pollo y el jamón todo picado. Damos unas vueltas para que se impregnen los sabores. Incorporamos la harina poco a poco sin dejar de remover y dejamos que se cocine un poco. En este instante suelo incorporar medio vaso más o menos de caldo de cocer el pollo. Creo que le da a la masa un sabor extra. Seguimos removiendo. Es el momento de echar la leche poco a poco y removiendo sin parar con una cuchara de madera. Rectificamos de sal. Cocinamos hasta que la masa engorde y se vaya despegando de las paredes de la olla. Cuando esté hecha la masa extendemos en una fuente o en un plato grande.
Tapamos con papel film y dejamos entibiar. Luego la metemos en la nevera durante varias horas, mejor de un día para otro.
Cuando hayan enfriado, cogemos trocitos de masa y damos forma a las croquetas. Podemos hacerlas alargadas o en forma de bolitas. Las rebozamos en huevo y en pan rallado y las freímos en aceite de oliva caliente. A medida que las vayamos quitando las ponemos en un plato con papel absorvente para escurrir el exceso de aceite y... A disfrutarlas!!!!
Me encantan las magdalenas. Siempre estoy buscando distintas recetas y ésta la tenía apuntada desde hace tiempo y hoy ha llegado su turno. La receta es de la web www.gastronomiaycia.com y está basada en una de Xavier Barriga, que es garantía de éxito según todos los blogueros. La verdad es que el resultado ha sido magnífico y ,sin duda, la repetiré. La masa me ha dado para 12 magdalenas, que, al paso que van, no durarán ni un suspiro. Vamos con la receta. Necesitaremos:
125 gr. de huevos (2 grandes)
175 gr. de azúcar
60 gr. de leche
190 ml. de aceite de girasol (yo utilizo el Koipesol Delice que es especial para repostería)
210 gr. de harina de repostería
5 gr. de levadura Royal
Extracto de vainilla (yo le eché la mitad de una cucharita de café)
Una pizca de sal
Para el ganaché de chocolate:
100 gr. de chocolate Nestlé especial postres
25 gr. de nata
Ponemos en un bol los huevos y el azúcar y se baten con las varillas hasta que se blanqueen y aumenten su volumen. Entonces, añadimos el aceite en hilo, poco a poco y seguimos batiendo. Hacemos lo mismo con la leche hasta que esten bien integrados los ingredientes.
Seguidamente, añadimos la harina con la levadura tamizadas, el extracto de vainilla y la pizca de sal y batimos hasta conseguir una masa homogénea. Cuando lo consigamos, batimos a mayor velocidad 2 minutos más.
Tapamos el bol con papel de aluminio y la dejamos en la nevera por lo menos una hora. Yo las dejé sobre 4 horas más o menos. Esto ayudará a que las magdalenas suban más. Es importante que la masa sea densa y que haya reposado.
Antes de rellenar las cápsulas de las magdalenas hacemos el ganaché de chocolate. Para ello ponemos en un recipiente apto para el microoondas el chocolate en trozos y la nata y calentamos 1 minuto (yo lo hice a 600W porque tenía miedo de que se quemara el chocolate). Cuando se abre el microondas no está deshecho de todo, pero al removerlo se unirán ambos ingredientes y se obtiene el ganaché. También se puede fundir al baño maría.
Precalentamos el horno con calor arriba y abajo a 250ºC.
Ponemos las cápsulas de papel en moldes rígidos (esto servirá para que no se esparramen las magdalenas y suban mejor).Yo utilizo una bandeja especial para magdalenas. Para verter la masa se puede utilizar una manga pastelera, una jarra de repostería o una cuchara grande.
Se llena la mitad de la cápsula con la masa de las magdalenas, se pone en el centro una cucharada de ganaché y de nuevo una cuarta parte de la masa.
Se espolvorea con azúcar la superficie y se introduce la bandeja en el horno.
Se baja la temperatura a 210ºC. Se hornean durante 15 minutos o hasta que hayan subido y esten doraditas. A mí me hicieron falta 5 minutos más.
Se retiran las magdalenas del horno y se dejan enfriar en una rejilla.
Animaros a probarlas!!! Recomendables 100%.
Hoy os traigo un bizcocho de leche y limón, pero como lo he hecho en el molde típico alargado del plum cake le he llamado así. La receta es de www.blogseitb.com (Magia en mi cocina) y el resultado es un bizcocho con un sabor y un olor a limón buenísimo, algo húmedo y muy esponjoso. Era la primera vez que probaba en vez del Royal las papeletas dobles de gaseosas y me han gustado.
Necesitaremos:
3 huevos
240 gr. de azúcar
Ralladura de dos limones
1/2 vaso (de los de nocilla) de aceite de girasol Koipesol Delice
3/4 vaso de leche tibia
Zumo de 1 limón
250 gr. de harina de repostería
2 papeletas dobles de gaseosas (dos blancas- dos azules). Las mías de Mercadona
Una pizca de sal.
En primer lugar batimos los huevos con la batidora eléctrica de varillas hasta que hayan espumado. Entonces añadimos el azúcar y la ralladura de los limones y continuamos batiendo durante 5/10 minutos más o menos hasta que la mezcla blanquee, se vuelva espumosa y duplique el volumen. A continuación se echa el aceite en forma de hilillo, poco a poco y sin dejar de batir hasta que se haya integrado perfectamente con la masa. Hacemos lo mismo con la leche y con el zumo de limón. Nos quedará una mezcla bastante líquida.
Añadimos la harina (previamente tamizada y mezclada con los sobres de las gaseosas) poco a poco e iremos mezclándola con las varillas manuales con movimientos envolventes y suaves hasta que esté perfectamente integrada. Por ultimo añadimos una pizca de sal.
La masa resultante se vierte en un molde de plum cake previamente engrasado con mantequilla y enharinado (sacudiendo el exceso de harina) y se hornea en horno precalentado a 180ºC con calor por arriba y por abajo durante 40- 45 minutos. Yo lo dejé 45 minutos y se me tostó mucho por arriba.Creo que en mi horno tengo que dejarlo menos tiempo o ponerle papel de aluminio por encima en cuanto se empiece a tostar demasiado. Aún así no salió seco.
Se saca del horno, dejamos que entibie un poco y desmoldamos. Dejamos enfriar sobre la rejilla.
Y ¡a disfrutarlo!!!
¿Qué puedo decir de este flan de leche condensada? Que me ha sorprendido. Pensaba que iba a salir demasiado dulce, más denso..., pero la verdad es que nada más lejos de la realidad. No es nada empalagoso, es ligerito y está buenísimo. La prueba es que no quedó nada. Vamos con la receta.
Necesitaremos:
Para el flan:
3 huevos
1 bote de leche condensada pequeño (375 gr.)
750 gr. de leche entera
Para el caramelo líquido:
5 cucharadas de azúcar
3 cucharadas de agua
Lo primero que hacemos es el caramelo líquido. Para ello, cogemos un cazo y lo ponemos al fuego con el azúcar y el agua. En un principio, no removemos. Esperaremos a que empiece a hacer burbujas y el azúcar cambie de color. Es el momento de remover. Lo hacemos con una cuchara de madera. Hay que tener cuidado de que no se nos queme. No tiene que quedar muy oscuro. Lo retiramos del fuego y lo vertemos con cuidado en el molde del flan, intentando caramelizar tanto el fondo como las paredes del mismo. Yo utilizo una flanera con tapa especial para olla express.
Mientras se enfría el caramelo, ponemos en un bol los huevos, la leche condensada y la leche entera y lo batimos bien con la batidora. Vertemos la mezcla en la flanera y la cerramos.
Colocamos la flanera en la cubeta de la Fussioncook con dos dedos de agua y cerramos la olla. Programamos Menú Manual 25 minutos con válvula cerrada y cuando pite dejamos que despresurice sola. Una vez que ocurra esto, sacamos la flanera y la dejamos templar antes de meterla en la nevera. Hay que dejar el flan enfriando varias horas, aunque lo mejor es hacerlo de un día para otro.
Espero que lo probeis!!!!!
Hoy quiero compartir una receta que por ser sencillísima no deja de estar buenísima: Macarrones con tomate gratinados. Esta receta la aprendí de mi madre, nos la hacía cuando éramos pequeños y el día que los había para nosotros era una fiesta.
Necesitaremos:
300 gr. de plumas
1 kg. y 1/2 de tomates maduros
1 cebolla
Un chorrito de aceite de oliva
Sal
Azúcar
Mantequilla
Queso parmesano rallado
Comenzamos haciendo la salsa de tomate. Para ello, pelamos la cebolla y la picamos finamente. También pelamos los tomates y los picamos menuditos.
En una olla pequeña ponemos un chorrito de aceite, echamos la cebolla picada y le dejamos pochar a fuego medio. Damos unas vueltas, añadimos los tomates troceados, una cucharadita de azúcar (para evitar la acidez del tomate) y una cucharadita de sal. Dejamos cocer a fuego lento durante una hora, removiendo de vez en cuando.
Un poco antes de que esté hecha la salsa de tomate, cocemos la pasta en agua hirviendo con sal el tiempo que indique el fabricante, en este caso 9 minutos. Escurrimos y mezclamos con la salsa ( que previamente hemos pasado por la batidora) en una fuente apta para el horno. Espolvoreamos con queso parmesano rallado y unos daditos de mantequilla (no muchos).
Gratinamos a 220ºC hasta que veamos la superficie doradita. Servimos y ¡a disfrutar!!!
Después de haber hecho los nuggets de pollo, pensé en hacer yo misma también los filetes rusos. Haciéndolos en casa te aseguras que son 100% naturales y además salen muy ricos.
Necesitaremos:
500 gr. de carne picada de ternera y cerdo
1 huevo
1 puñado de miga de pan del dia anterior
2 cucharadas de leche
1 ramita de perejil fresco
1 diente de ajo
Sal
Pimienta negra recién molida
Harina
Aceite de oliva para freir
Comenzamos poniendo en el mortero un poco de sal, el diente de ajo sin el germen (para que no nos repita) y la ramita de perejil troceada. Machacamos hasta que se forme una especie de pasta y reservamos. Seguidamente juntamos en un plato la miga de pan con la leche y aplastamos con un tenedor.
En un bol ponemos la carne picada, le añadimos un huevo y la miga mojada en leche. Mezclamos en principio con un tenedor, aunque luego es mejor ir amasando con las manos para se integren bien los ingredientes. Añadimos el contenido del mortero, salpimentamos y mezclamos. Dejamos reposar la carne un rato en la nevera (yo la dejé una horita).
Después vamos haciendo bolas y aplastando con las manos hasta hacer los filetes (tienen que quedar finos) Los rebozamos por harina y los freimos en aceite de oliva caliente para que se doren y queden jugosos.
Ricos, sanos y 100% naturales!
Qué buenas han salido estas magdalenas! Creo que son las mejores que he probado en mi vida.
Las he hecho ayer y no he podido esperar para publicarlas en el blog porque están exquisitas. Tiernas, esponjosas, con un sabor espectacular... No os las podeis perder porque si las probais formarán parte de vuestro recetario habitual seguro.
Después de haber hecho las magdalenas de nata, y haber tenido bastante éxito entre mis congéneres jejeje, me apetecía hacer otras de distinto sabor. Buscando por Internet, encontré esta receta de Magdalenas de Naranja en www.lacocinamagica.net y como ya había hecho un bizcocho de naranja y me gustó el sabor que da esta fruta, pensé que las magdalenas no iban a ser menos.
Necesitaremos:
4 huevos grandes a temperatura ambiente
250 gr. de azúcar para la masa y un poquito más para espolvorear
Ralladura de media naranja
200 gr. de aceite de girasol Koipesol Delice (es especial para repostería)
100 ml. de nata para montar
El zumo de media naranja
350 gr de harina con levadura (la mía Harimsa)
Una pizca de sal (acentúa el sabor)
En primer lugar, empezamos batiendo con la batidora de varillas los huevos con el azúcar y la ralladura de naranja durante diez minutos, más o menos, hasta que los veas esponjosos y blanquecinos.
A continuación, añadimos el aceite de girasol, la nata tal cual (sin montar) y el zumo de media naranja y seguimos batiendo durante cinco minutos.
Añadimos la harina con levadura poco a poco, tamizándola y mezclándola con la ayuda de las varillas. También le añadimos una pizca de sal.
Y ahora ha llegado un paso muy importante: La masa resultante se mete en la nevera durante al menos una hora (yo la dejé sobre 4 horas) para que la magdalena suba más y haga ese copete maravilloso.
Un poco antes de proceder al rellenado, precalentamos el horno a 200ºC con calor por arriba y por abajo.
Una vez que ha reposado la masa, tenemos dos opciones:
O colocamos las cápsulas de papel dentro de moldes rígidos desechables de papel de aluminio(tambien valen moldes metálicos de flan individuales) o utilizamos una bandeja especial para hornear magdalenas. Así evitamos que las cápsulas se abran con el peso de la masa. Yo utilicé los dos métodos porque la bandeja tiene capacidad para 12 magdalenas y con esta receta salen sobre 18 magdalenas.
Rellenamos las 3/4 partes de las cápsulas porque si la llenamos más pueden salirse. Espolvoreamos cada magdalena con azúcar. Hay que evitar echar demasiado por si impide que suba correctamente la masa.
Introducimos en el horno y horneamos durante 18 minutos. Pinchamos con un palillo y si sale limpio es que están hechas.
Las sacamos y las dejamos cinco minutos en la bandeja para que templen un poco y después las colocamos encima de una rejilla para que enfrien del todo.
Una vez que estén frias se pueden meter en un recipiente hermético para que se conserven mejor. Yo como eran muchas utilicé el portatartas.
A disfrutarlas!!!!
Después de haber probado la lasaña de verduras asadas del VIPS, me dije que tenía que hacer mi propia versión casera . Tengo que decir que no he asado las verduras, sino que las he rehogado, he aumentado el número de éstas y he cambiado el tipo de queso (en la del vips es queso ricotta, creo, y yo le he puesto un trocito de rulo de queso de cabra). Pero el resultado ha sido magnífico, mejor incluso, y esta receta ya forma parte de mi recetario habitual.
Necesitaremos:
1 calabacín
1/2 pimiento rojo
1/2 pimiento verde
300 gr. de champiñones frescos enteros
2 puerros
1 berenjena
1 y 1/2 kg. de tomates de salsa
1 cebolla
1 rodaja de rulo de queso de cabra del ancho de un dedo
2 paquetes de lasaña fácil de El Pavo
1 litro de leche
100 gr. de mantequilla
100 gr. de harina
Sal
Azúcar
Aceite de oliva
Nuez moscada
Queso rallado
En primer lugar, empezaremos haciendo la salsa de tomate. Para ello cortamos muy fina la cebolla. Seguidamente pelamos y cortamos los tomates en cuadraditos muy pequeños. Ponemos una olla al fuego con un fondo de aceite y rehogamos la cebolla hasta que esté transparente. Añadimos el tomate y una cucharadita de azúcar (para evitar la acidez del tomate) y una de sal. Dejamos que hierva, revolvemos y cocinamos a fuego lento durante una hora.
Mientras se está cocinando la salsa de tomate, pelamos y cortamos la berenjena en taquitos. La colocamos en un colador y la salamos abundantemente (esto es para evitar que la berenjena amargue). Dejamos que repose durante 15 minutos, la lavamos y la secamos. La sofreimos en una sartén con un poco de aceite a fuego medio y reservamos.
A continuación, cortamos los dos tipos de pimiento y el calabacín en cuadraditos. El puerro lo cortamos en rodajas y los champiñones en láminas. Colocamos una tartera baja al fuego con un poco de aceite. Añadimos los dos tipos de pimiento y el calabacín. Cuando se hayan rehogado un poco añadimos el puerro y, por último, los champiñones. Dejamos hacer a fuego lento.
Una vez que ya tengamos el relleno hecho, hacemos la bechamel. Para ello, calentamos la mantequilla. Cuando se haya derretido añadimos la harina, la mezclamos bien y dejamos que se cocine un poco a fuego no muy fuerte. Después vamos añadiendo poco a poco leche caliente y revolviendo con unas varillas enérgicamente para que no se hagan grumos. Cuando ya esté en el punto que deseamos añadimos un poquito de nuez moscada y sazonamos. Reservamos.
Ahora vamos con las placas de la lasaña. He utilizado las de "Lasaña fácil de El Pavo". Solo hay que sumergirlas en agua caliente durante 10 minutos, secarlas y utilizarlas. Era la primera vez que las utilizaba y la verdad es que he quedado muy contenta con el resultado. Sin duda, las utilizaré otra vez.
Podemos proceder al montaje de la lasaña.
En primer lugar ponemos una capa de placas de lasaña. Por encima, extendemos una capa de salsa de tomate, que previamente pasamos por la batidora para que esté más uniforme.
Seguimos con otra capa de placas de lasaña y encima el sofrito de las verduras con unos trocitos de queso de cabra.
También añadimos un poquito de bechamel para que la lasaña quede jugosa.
Repetimos cada capa una vez más y cubrimos con placas de lasaña, vertemos la bechamel que nos quede, espolvoreamos con queso rallado y ponemos en horno precalentado a 200ºC durante 20 minutos por arriba y por abajo. Al final ponemos el grill unos dos o tres minutos para que se acabe de gratinar.
